Pensó ella que aquel día sería distinto. Pensó que ese día estaría lleno de luz, cariño, felicidad y tranquilidad.
Pensó - por un momento - que esta fecha sería en familia. Una nueva familia.
Él tenía lo que ella siempre había anhelado.
Él compartía lo que ella siempre había querido.
Tenía en su mente el viaje, los regalos, la comida, los abrazos...todo.
Volvió a la realidad, a la cruda verdad y recordó por qué ya no sería así.
Sintió un hoyo inmenso que leperforaba el estómago.Se le apretó la garganta.
Y entendió, que aún cuando ella hiciera el mejor esfuerzo por darle - como siempre lo ha intentado - a su hijo un buen día de celebración, ella seguiría celebrando con nostalgia, pena y un gran vacío.
Esperanzada - de que algún año - esta celebración sea distinta.